¿Miedo?
Miedo hay que tenerle:
a los políticos,
a los narcos,
a los delincuentes (tanto de cuello blanco como de punzón ensangrentado),
a los impuestos injustificados y posteriormente robados,
a los militares de armas largas y cerebros pequeños,
a los religiosos hipócritas,
a los homófobos,
a los xenófobos,
a los que abusan de menores / de mujeres / de indefensos,
a los que embarazan niñas,
a los que violan niños,
a los que matan / por celulares / por RD$500 / por un vehículo,
a los cánones estéticos irreales,
a la violencia de género,
a la pobreza intelectual,
a la ignorancia,
a la pérdida de identidad cultural,
a la venta de nuestras tierras,
a la pérdida de nuestros recursos naturales,
a la precariedad de nuestro sistema educativo,
a la asquerosidad de nuestros hospitales públicos,
a la quasi-ausencia de una seguridad social que proteja al ciudadano,
a la exclusión social,
a la corrupción,
a la desinformación mediática,
a la manipulación de masas,
a la inflación de partidas presupuestarias,
a la extinción de nuestras especies,
a la muerte lenta y agonizante de nuestro idioma,
al abuso de poder,
al nepotismo,
al racismo,
al amiguismo político,
…
Hay mucho que temer aquí dentro como para necesitar cruzar cualquier frontera para buscar “al cuco” cuando tenemos tantos demonios “en casa”…
Esto lo escribo a propósito de una pseudo-noticia que se ha hecho eco en redes sociales y que me obliga a preguntarme ¿cuándo será que algunos especímenes locales usarán el cerebro para pensar y no para flotar en el vacío ideológico de sus cabezas huecas?