Mi isla es -sin lugar a dudas- un continente en miniatura, cuenta con playas espectaculares (muchas de las cuales son consideradas de las mejores del mundo), altas montañas y picos (entre ellos el más grande del Caribe y Las Antillas), una impresionante bio-diversidad que incluye desde bosques fríos hasta desiertos, climas donde la temperatura baja de los 0º y otros donde sube hasta los casi 40ºC en la misma temporada, y una envidiable riqueza de flora y fauna con una amplísima variedad de especies endémicas.
Quien ve mi país en el mapa pensará que es fácil conocerlo ya que «todo esta cerca», pero el tema resulta engañoso pues pese a su corta extensión de apenas 48,310.97 km2, la República Dominicana tiene 1 Distrito Nacional y 31 provincias no siempre bien comunicadas. A esto se suma que, la mayoría de las veces, los destinos rurales -que son menos comerciales que los archifamosos del all inclusive- cuentan con escasa o nula información de turismo interno.
Viviendo en Madrid me di cuenta de lo poco que conocía mi paisito cuando me encontré extranjeros que dominaban mejor las atracciones de mi media isla y llena de vergüenza me propuse visitar al menos un destino de cada una de sus provincias.
Entre escapada y escapada, en compañía de mi novio y de algunas amistades que se han unido sobre la marcha, casi he logrado cumplir la meta a escala de provincias. Este mapa muestra como a cuenta de bromas ¡ya sólo me faltan 5! 😀
PEEEEERO, la cosa se complicará después pues estoy clara que haber visitado brevemente un pueblo no es conocerlo y mucho menos sabiendo que en cada uno de ellos se esconden pequeñas maravillas, muchas de las cuales aún se encuentran prácticamente vírgenes.
Así que aún quedan un montón de destinos por visitar, re-conocer los favoritos y hacerlo con lujo de detalles, todo consecuencia de la sed de conocimiento y mis infinitas ganas de aventura.
Mi país es maravilloso y si tienes la dicha de estar en él, ya sea por pocos días o por toda una vida, te invito a conocerlo pues te aseguro que no te vas a arrepentir. Aunque pensándolo bien si te arrepentirás… ¡de no haberlo hecho antes!
[Creo que está de más decir que estoy a la orden si crees puedo ayudarte con información de alguno de los destinos que ya he visitado, pero por si acaso… ¡ya está dicho!]