El hombre dominicano, ¡toda una perla!

Todo aquel que las ha transitado puede afirmar que las calles de mi país como menos son pintorescas, y no me refiero a los colorines de las casas que salen en las postales (que no son la capital) sino a las "creativas" formas en que se expresan algunos especímenes masculinos. Hay que saber que a… Seguir leyendo El hombre dominicano, ¡toda una perla!

El porque no uso faldas

Hoy me dieron ganas de utilizar falda, hacía mucho que no me ponía una y total ¡está ahí en mi closet! así que fui a por ello y una vez vestida me vi en el espejo, me sentí tan cómoda que me pregunté ¿por qué no hago esto más a menudo? Cuando salí a la… Seguir leyendo El porque no uso faldas

Lo que para mi caracteriza al hombre dominicano

Desde mi punto de vista el hombre dominicano se caracteriza por una cosa: su muela. Ayer estuve en un colmadón con unos amigos, que a la vez trajeron a otros amigos y así sucesivamente. De repente me encontré ante un grupo de dominicanos -tanto casados como solteros- y me percaté de que lo que los… Seguir leyendo Lo que para mi caracteriza al hombre dominicano

Español atrevido

Los españoles no son atrevidos -eso que en Dominicana llamamos “freco”-…  ¡Hasta que lo son! Me explico.: A parte de la oleada de piropos por desinhibición alcohólica y futbolera de los últimos días, acá los chicos suelen ser bastante timidos y reservados. Yo digo incluso –sobre todo cuando salen de fiesta- que tienen dos estados:… Seguir leyendo Español atrevido

Un pedazo de carne

Siguiendo la línea de los piropos que una acaba escuchando cuando se pasea por las calles con falda y pinta veraniega, comparto uno que me han dicho anoche y que va en una dirección totalmente opuesta al compartido anteriormente. Estaba con una amiga en un garito italiano llamado La Naranja, súper chulo y altamente recomendado… Seguir leyendo Un pedazo de carne

Deuda Callejera

¡Eh tu, me debes algo! Guapa. Tu, ¡escucha! ¡En serio, me debes algo! Repetía insistente una voz distante pero poderosa. Lo miro, pues siento que me habla a mi y que no podría pasar de el, que no me dejaría ignorarle. Al voltear el rostro y verlo me dice con expresión amable: Linda, es que… Seguir leyendo Deuda Callejera